Tres años de espera y asociarse con el Gobierno venezolano en empresas mixtas, en abril de 2011, no fueron suficientes para que Tracto América, Orval y Venequip Agro empezaran a ensamblar tractores en el país, pese a que estaban listas para operar.

“Retrasos en los pagos de las diversas fuentes de financiamiento impidieron las inauguraciones de las fábricas de camiones y tractores” proyectadas por la Corporación de Industrias Intermedias de Venezuela (Corpivensa), según la Memoria y Cuenta 2011 del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Industrias Intermedias.

Aunque el informe no especifica cuáles fuentes de financiamiento se retrasaron en los pagos, un conocedor del sector explicó que “cuando se conforma una nueva empresa, los principales financistas son los mismos socios. En este caso, el Estado a través de Corpivensa y las firmas privadas”.

En enero de este año, Erich Hartkopf, presidente de la Cámara Venezolana de Distribuidores de Repuestos, Equipos Pesados y Agrícolas (Cavedrepa), señaló a este diario que las plantas debían entrar en funcionamiento el pasado mes de noviembre y que, en ese momento, sólo esperaban por los oficios de Material de Ensamblaje Importado para Vehículos (Meiv) a fin de empezar a operar (El Mundo, E&N/ 18-01-2012)

Llama la atención que la Memoria y Cuenta señala que a Orval y Venequip “se les aprobó” los Meiv, mientras que Tracto América “realiza las importaciones” del material de ensamblaje, pero no precisa las fechas de entrega.

Industria automotriz

En la industria automotriz, completar un proceso de importación puede tardar hasta seis meses, desde que se cierra el trato con las casas matrices hasta que llegan las partes al país.

Por ello, a comienzos de 2012 Hartkopf calculó que “a mediados de año estas empresas podrían empezar a ensamblar, si les entregan próximamente los oficios Meiv”.

Las únicas tres empresas a las cuales se les incluyó sus planes de producción para 2012 en la Memoria y Cuenta 2011 fueron Tracto América, que prevé ensamblar 600 unidades de la marca Massey Ferguson; Orval, cuya meta es producir 700 unidades de la marca John Deere; y Venequip Agro, que espera terminar 800 unidades New Holland.

Además de estas tres fábricas de tractores que están listas para operar, el año pasado el Gobierno firmó acuerdos y calificó como empresas ensambladoras a Autopartes Lara (tractores, camiones y motocicletas), KMW (motocicletas), Civetchi (camiones y pick up) y Emsambladora de Oriente (chasis para bus y camiones).

El informe detalla, sin embargo, que los convenios de ensamblaje firmados entre abril y mayo de 2011 tienen avances en su infraestructura entre 50% y 80%.

Venirauto abrió 5 concesionarios La empresa mixta Venirauto Industrias estableció “una red de distribución y venta de vehículos a precios justos”, según la Memoria y Cuenta 2011. Se efectuaron contratos de concesión en Portuguesa (Gobernación), Acarigua, Barinas, Cojedes y Maracay, “para la comercialización de los vehículos ensamblados en Venirauto Industrias”.

No obstante esta expansión, al cierre de 2011 la automotriz con 35,9% de capital iraní sólo pudo ensamblar 4.166 unidades (cerca de 25%) de las 16.188 que se trazó como meta. Del total, 2.240 fueron modelo Centauro LX y 1.926 fueron del Turpial modelo B.

Las restricciones internacionales impuestas a Irán y “los largos períodos de espera” para la obtención de aprobación de divisas extranjeras ante el Banco Central de Venezuela, fueron los principales obstáculos señalados por la empresa mixta para no cumplir sus objetivos.